EL RATÓN GIGANTE
Erase una vez... un ratón llamado Pupi. El vivía en Ratolandia.
El era el más bajo de toda Ratolandia.
Pupi tenía un padre que se llamaba Suso y una madre que se llamaba Lucía.
Suso le dijo un día a Pupi que ya tenía que salir de Ratolandia.
Pupi le contestó que todavía era como un enano y que me da miedo ir sin mis papás.
Entonces el padre de Pupi no tuvo otra elección y le dijo: cierra los ojos Pupi.
Pupi cerró los ojos y Suso lo llevó hasta las afueras de la ciudad.
Suso le dijo que siguiese todo recto y cuando note un fresco aire que se quite la venda y que no vuelva a entrar.
Pupi obedeció a su padre porque sino le iba a caer una buena.Entonces miró al edificio de enfrente que era un laboratorio y entró allí ,vio unos hombres muy grandes(era normal porque yo era un ratón) y entonces vio un líquido verde que se parecía a los refrescos verdes de Ratolandia.
Luego se subió a la mesa donde estaba ese líquido verde y se lo bebió.Después volvió a entrar por la cueva que era la entrada a Ratolandia.
Cuando entró sintió que algo me cambiaba:se estaba volviendo gigante.
Tuve que pasar reptando como una serpiente y ¡todos los ratones se asustaron al verme!
-Yo les dije:tranquilizaos amigos, soy yo, Pupi.
-Mi madre me dijo: ¡por Dios hijo mío,¡ cúanto has crecido!
-Y yo le dije: mamá,¿ creés que volvería a ser como antes?.
- Y mi mamá me dijo:no sé ,si volverás a ser como antes, hijo mío, pero siempre te querré igual, siendo un gigante o un pequeñito.
Mis lágrimas me dieron en el cuerpo y se redujo mi tamaño a como lo era antes.
-Mami he aprendido una gran lección : me da igual ser grande o pequeño, lo importante es que me quieran.
muy chulo
ResponderEliminarHalaaa, te has esforzado mucho.
ResponderEliminarIñigo que pasada... fenomenal
ResponderEliminarIñigo que pasada... fenomenal
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